Heney Awed sigue en la lucha a los 98 años de edad
Nació el 15 de noviembre de 1910 en Brasil y llegó a Venezuela en el año 1949 después de una intentona de golpe en Panamá
Un sábado cualquiera de principios de la década de los 60, el jefe Luis "Bottino" Villarroel llega a su casa en el 23 de Enero, saca una mesa para el jardín, trae un cable y conecta el aparato. Los vecinos llegan con sus banquitos y se instalan a ver la lucha libre por televisión. Una cita que se hizo costumbre para los venezolanos por muchos años.
Uno de los personajes que sobresalía era Heney Awed, un atleta que había llegado al país por mera casualidad. "Llegué a Venezuela el 28 de enero de 1949. Tenía un contrato para ir a Hollywood donde debía organizar algunas escenas de violencia, pero cuando andaba por Panamá hubo una intentona de golpe y no seguí para Estados Unidos, me vine a este país por invitación de un amigo y aquí estoy desde ese día", recuerda como si fuera hoy el atleta nacido en el sector de San José de Río Preto (Sao Paulo), el 15 de noviembre de 1910.
Awed, quien a sus 98 años de edad mantiene vivos sus recuerdos, nos recibe en su casa, cerca de la plaza Candelaria.
Una gran cantidad de trofeos, medallas y diplomas adornan una pequeña sala. Su pipa, que ha sido el identificador de su vida, se mantiene sobre la mesa a la espera del fuego, y allí salta su primera reflexión: "Mi familia es la pequeña patria; y la patria, mi gran familia. Todos ustedes son mi familia".
Amor en Caracas.
Blanca se convirtió en el gran amor de su vida. Se casó con ella y de esa unión nacieron tres hijos: Heney jr, Fued Omar y Leila.
Y es precisamente Leila quien acompaña al gladiador en sus últimos movimientos sobre el ring de la vida. "Yo era una niñita y me crié en la colchoneta del gimnasio. Por intermedio de mi papá conocí a personajes como Edson Arantes do Nascimento, Pelé; el campeón mundial Carlos "Morocho" Hernández, y a la única medalla de oro olímpica del boxeo venezolano, Francisco "Morochito" Rodríguez, entre otros grandes del deporte.
Nació el 15 de noviembre de 1910 en Brasil y llegó a Venezuela en el año 1949 después de una intentona de golpe en Panamá
Un sábado cualquiera de principios de la década de los 60, el jefe Luis "Bottino" Villarroel llega a su casa en el 23 de Enero, saca una mesa para el jardín, trae un cable y conecta el aparato. Los vecinos llegan con sus banquitos y se instalan a ver la lucha libre por televisión. Una cita que se hizo costumbre para los venezolanos por muchos años.
Uno de los personajes que sobresalía era Heney Awed, un atleta que había llegado al país por mera casualidad. "Llegué a Venezuela el 28 de enero de 1949. Tenía un contrato para ir a Hollywood donde debía organizar algunas escenas de violencia, pero cuando andaba por Panamá hubo una intentona de golpe y no seguí para Estados Unidos, me vine a este país por invitación de un amigo y aquí estoy desde ese día", recuerda como si fuera hoy el atleta nacido en el sector de San José de Río Preto (Sao Paulo), el 15 de noviembre de 1910.
Awed, quien a sus 98 años de edad mantiene vivos sus recuerdos, nos recibe en su casa, cerca de la plaza Candelaria.
Una gran cantidad de trofeos, medallas y diplomas adornan una pequeña sala. Su pipa, que ha sido el identificador de su vida, se mantiene sobre la mesa a la espera del fuego, y allí salta su primera reflexión: "Mi familia es la pequeña patria; y la patria, mi gran familia. Todos ustedes son mi familia".
Amor en Caracas.
Blanca se convirtió en el gran amor de su vida. Se casó con ella y de esa unión nacieron tres hijos: Heney jr, Fued Omar y Leila.
Y es precisamente Leila quien acompaña al gladiador en sus últimos movimientos sobre el ring de la vida. "Yo era una niñita y me crié en la colchoneta del gimnasio. Por intermedio de mi papá conocí a personajes como Edson Arantes do Nascimento, Pelé; el campeón mundial Carlos "Morocho" Hernández, y a la única medalla de oro olímpica del boxeo venezolano, Francisco "Morochito" Rodríguez, entre otros grandes del deporte.
Creo que uno de los legados de mi padre es que durante toda su vida ayudó a gente muy humilde", recordó su hija.
Awed fue un luchador de estilo limpio y elegante que se convirtió en ídolo y siempre se preocupó por los niños de la calle. Una de sus anécdotas tiene que ver con el "Diablo de la Salsa" Oscar D’ León. "Él fue alumno mío. Se acercaba al gimnasio que yo monté y desde la puerta veía los entrenamientos. No tenía dinero para pagar. Yo le decía al muchacho `pasa y entrena, y cuando tengas real me pagas’. Hace cinco años nos encontramos en un programa de Sábado Sensacional y le dije: `Todavía no me has pagado".
Por sus manos pasaron púgiles como el campeón argentino, Nicolino Locche y asesoró a los venezolanos Fulgencio Obelmejías y Ernesto "Gato" España. "La vida sin placer no tiene sentido. Para los islámicos la vida sin valor no tiene valor. Para los venezolanos la vida no vale nada", repite una y otra vez el luchador.
Ahora sí. Enciende su pipa y recuerda que hace mucho tiempo lo llamaron "Popeye" por su parecido con el personaje de las comiquitas que andaba tras los pasos de la flaca Olivia. "Un hombre tiene la edad de sus arterias", sentencia. Y es que las arterias de este gladiador son blindadas y a prueba de fuego.
Awed fue un luchador de estilo limpio y elegante que se convirtió en ídolo y siempre se preocupó por los niños de la calle. Una de sus anécdotas tiene que ver con el "Diablo de la Salsa" Oscar D’ León. "Él fue alumno mío. Se acercaba al gimnasio que yo monté y desde la puerta veía los entrenamientos. No tenía dinero para pagar. Yo le decía al muchacho `pasa y entrena, y cuando tengas real me pagas’. Hace cinco años nos encontramos en un programa de Sábado Sensacional y le dije: `Todavía no me has pagado".
Por sus manos pasaron púgiles como el campeón argentino, Nicolino Locche y asesoró a los venezolanos Fulgencio Obelmejías y Ernesto "Gato" España. "La vida sin placer no tiene sentido. Para los islámicos la vida sin valor no tiene valor. Para los venezolanos la vida no vale nada", repite una y otra vez el luchador.
Ahora sí. Enciende su pipa y recuerda que hace mucho tiempo lo llamaron "Popeye" por su parecido con el personaje de las comiquitas que andaba tras los pasos de la flaca Olivia. "Un hombre tiene la edad de sus arterias", sentencia. Y es que las arterias de este gladiador son blindadas y a prueba de fuego.
5 comentarios:
Hamilton Sanchez Campeón Panamericano 1985-Medallista Panamericano Senior 1989-90
Heney Awed,represento uno de los valores mas memorables a referencia de la Histografia Deportiva de Venezuela su legado es una huella tangible expuesta en la Lucha Olimpica Venezolana que formo a la razon de la historia hace ya 66 años. En justo reconocimiento todo gladiador formado en Venezuela desde 1950 hasta nuestro dias llevamos algo de este insigne hombre Luchador.
Paraguana -Edo- Falcon
Hamilton Sanchez Campeón Panamericano 1985-Medallista Panamericano Senior 1989-90
Heney Awed,represento uno de los valores mas memorables a referencia de la Histografia Deportiva de Venezuela su legado es una huella tangible expuesta en la Lucha Olimpica Venezolana que formo a la razon de la historia hace ya 66 años. En justo reconocimiento todo gladiador formado en Venezuela desde 1950 hasta nuestro dias llevamos algo de este insigne hombre Luchador.
Paraguana -Edo- Falcon
Fue un entrenador de primera categoría, me dejo entrenar gratis cuando no pude pagar y de el aprendi una tecnica que hoy dia, 50 años despues tidavia uso por lo cual siempre le estare agradecio.
Luis Quintero..
Heney Awed fue un luchador y entrenador con una gran calidad humana. Apoyando siempre a los talentos sin recursos, entre ellos mi Papá. Fue durante muchos años entrenador de mi padre, Fernando Moreno Conde, quien gracias a sus consejos y técnicas de lucha logró muchos triunfos y campeonatos Nacionales e Internacionales. Siempre recuerdo con gran emoción a mi padre contándome como lo entrenaba y aconsejaba Heney Awed.
Conocí al profesor en su gimnasio en la Ave Urdaneta hace 55años,,un profesor de primera en todos los aspectos;paciencia y conocimiento del cuerpo humano y cómo fortalecerlo ;conocí a Dos campeónes que se entrenaron durante mi estadía en el gimnasio:El morochos Hernández y Obel Mejias;un saludo a mi profesor,,tengo 67 años y hago la rutina conque el me recibió y me mantengo al día y sin lesiones ,,todo un genio de la gimnasia,lucha y entrenamiento Don Henry Awed
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