¡Repudio y castigo a los responsables del brutal asesinato de Richard Gallardo, Luis Hernández y Carlos Requena, dirigentes obreros de Venezuela! El sicariato ordenado por los patronos y la burguesía cobra la vida de tres dirigentes sindicales, clasistas y revolucionarios
¿QUE ES ALPINA?
Alpina es una fábrica de capitales colombianos instalados en Venezuela en los últimos 10 años. Producen y distribuyen leches, compuestos, postres, quesos y derivados. Explotan trabajadores en Colombia, donde está la matriz fundada en 1945, con sedes en Ecuador, Centroamérica y el sur de EEUU. En Venezuela la planta de Villa de Cura, a pocos kilómetros de Maracay, capital de Aragua, fue ocupada por sus 400 trabajadores porque la empresa se niega a pagar las utilidades de Ley.
El hecho es grave en si mismo, pues se trata del asesinato de tres dirigentes sindicales, que además de comprometido con los derechos sociales de los trabajadores, representan al tipo de sindicalista que no le ponían precio a sus gestiones sindicales. Desde hoy son mártires del movimiento obrero venezolano y de todos los oprimidos venezolanos que participan de la revolución bolivariana.
El jueves 27 fueron asesinados los compañeros Richard Gallardo, Luis Hernández y Carlos Requena, dirigentes de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT) del Estado Aragua, Venezuela, y de la Unidad Socialista de Izquierda (USI).
Los hechos ocurrieron en la noche del jueves 27 de noviembre, cuando los compañeros se encontraban en la Encrucijada , Cagua, una zona industrial y de población obrera y popular de estado de Aragua. Las primeras informaciones indican que habrían sido fusilados desde un móvil. Durante todo el día los compañeros estuvieron apoyando activamente a los 400 trabajadores de la multinacional de productos lácteos Alpina, de propiedad de colombianos, quienes se encontraban en conflicto. Los obreros de Alpina permanecían tomando la planta por incumplimiento del contrato y una amenaza de la patronal de cierre de la empresa.
Al mediodía del jueves 27 la policía entró, reprimiendo salvajemente y desalojando a los obreros. Más tarde, con la solidaridad de la UNT encabezada por los compañeros, los trabajadores recuperaron la planta. Quedaron 4 obreros heridos de la represión.
Horas después Luis Hernández, dirigente de la UNT y de la Pepsi Cola y Richard Gallardo, presidente de la Unión Nacional de Trabajadores en el Estado Aragua, exigieron públicamente, en un comunicado de prensa, a las autoridades locales y al nuevo gobernador electo por el PSUV en Aragua, Rafael Isea, que se pronunciaran sobre este gravísimo hecho, que "indica la prepotencia y la tiranía de unos patronos que violan los derechos de los trabajadores, amenazan con cerrar la planta y a pesar de ello reciben el apoyo de los uniformados en la región".
En el comunicado se anunciaba que la central sindical se declaraba en alerta, para impedir que la multinacional cierre la planta. Declaraban que, si eso ocurría: "exigiremos al gobierno su expropiación y la pondremos a producir bajo control de los trabajadores". Por la noche eran brutalmente asesinados, junto a Carlos Requena, dirigente de la UNT. Luis Hernández y Richard Gallardo habían participaron como candidatos a las elecciones del pasado domingo 23 de noviembre, postulados por el partido Unidad Socialista de Izquierda (USI) para la Alcaldía del municipio Zamora y la Asamblea de Diputados de Aragua, respectivamente.
Repudiamos este crimen a dirigentes obreros, clasista y socialistas que siempre han estado al frente de las luchas obreras y populares de su país pero también eran era solidarios con todas las luchas de los trabajadores del mundo contra el imperialismo y la explotación capitalista.
Llamamos a repudiar este crimen, con pronunciamientos, con marchas a las embajadas o consulados de Venezuela, con acciones unitarias en todo el mundo, exigiendo al gobierno de la República Bolivariana de Venezuela, presidido por Hugo Chávez, y al gobierno regional de Aragua, la inmediata apertura de una investigación que de con el paradero de los asesinos materiales e intelectuales de este pavoroso crimen y que se los castigue en forma inmediata.
Llamamos a pronunciarse a personalidades, organizaciones sindicales, políticas, estudiantiles, de derechos humanos para que este crimen no quede impune y para evitar nuevos crímenes atroces contra trabajadores.
Comité Ejecutivo Internacional de la UIT-CI
(Unidad Internacional de Trabajadores-Cuarta Internacional) 28 de noviembre de 2008