Ha muerto fisicamente José Félix Peraza, Cronista de El Hatillo
Nació en la Parroquia Santa Rosalía de Caracas, el 12 de octubre de 1929. Comienza a visitar El Hatillo en el año 1945, cuando comienza a preocuparse por la historiografía del lugar. Literato, Arqueólogo e Historiador por vocación, en compañía del Prof. Cruxent, realizó muchos estudios arqueológicos en El El Hatillo.
Nació en la Parroquia Santa Rosalía de Caracas, el 12 de octubre de 1929. Comienza a visitar El Hatillo en el año 1945, cuando comienza a preocuparse por la historiografía del lugar. Literato, Arqueólogo e Historiador por vocación, en compañía del Prof. Cruxent, realizó muchos estudios arqueológicos en El El Hatillo.
Se residencia en El Hatillo en 1968 y estuvo constantemente estudiando la historia hatillana. Fue nombrado Cronista Oficial del Municipio El Hatillo y estuvo inscrito como miembro de la Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades de Venezuela (ANCOV).
Desde allí emprendió una lucha titánica por la recuperación de los linderos originales del Municipio, logrando una restitución parcial, estando pendiente la recuperación de una porción significativa de terreno que históricamente y basado en el documento fundacional le pertenece al Municipio El Hatillo.
Remontándose en el tiempo Peraza revela los orígenes de este pueblo, ocupado por grupos Caribes de la etnia Mariches, quienes valientemente guiados por sus caciques Aricabacuto y Yapiaracay, lugartenientes del gran Tamanaco enfrentaron a los invasores en los alrededores del Peñón del Indio y en las Filas de Turgua y quienes dejaron sus huellas en las Piedras Pintadas que el mismo Peraza junto con el arqueólogo José María Cruxent dio a conocer a los venezolanos y al mundo, en la exploración que ambos hicieran a finales de los años 40 por la cuenca Baruta-El Hatillo y auspiciada por la Fundación La Salle.
Dentro de sus logros históricos importantes están el haber impedido que se pierda la memoria de este Pueblo, uniéndose así a la legión de hombres y mujeres, que impidieron la destrucción de nuestra memoria colectiva, tiene en su haber el estudio y revelación de la historia del Fundador de El Hatillo, Baltasar de León, así como, ubicar en el contexto histórico correcto a Manuel Escalona, así como a su hermano Juan de Escalona.
Remontándose en el tiempo Peraza revela los orígenes de este pueblo, ocupado por grupos Caribes de la etnia Mariches, quienes valientemente guiados por sus caciques Aricabacuto y Yapiaracay, lugartenientes del gran Tamanaco enfrentaron a los invasores en los alrededores del Peñón del Indio y en las Filas de Turgua y quienes dejaron sus huellas en las Piedras Pintadas que el mismo Peraza junto con el arqueólogo José María Cruxent dio a conocer a los venezolanos y al mundo, en la exploración que ambos hicieran a finales de los años 40 por la cuenca Baruta-El Hatillo y auspiciada por la Fundación La Salle.
Dentro de sus logros históricos importantes están el haber impedido que se pierda la memoria de este Pueblo, uniéndose así a la legión de hombres y mujeres, que impidieron la destrucción de nuestra memoria colectiva, tiene en su haber el estudio y revelación de la historia del Fundador de El Hatillo, Baltasar de León, así como, ubicar en el contexto histórico correcto a Manuel Escalona, así como a su hermano Juan de Escalona.
Poseyó numerosos escritos en diferentes diarios y revistas. Cofundador del Semanario El Hatillano desde 1985, Colaborador con el quincenario La Guía del Sureste. Colaborador en las Memorias de la Sociedad de Ciencias Naturales La Salle y la publicación El Hatillo, Territorio Afortunado. Asimismo ha divulgado la historia local como conferencista.
Desde siempre ha luchado por la protección y conservación del patrimonio cultural del municipio El Hatillo. Hombre sabio y humilde, gran amigo, siempre se le encontraba en su pequeña oficina rodeado de libros, documentos, objetos valiosos, mapas antiguos, fotografías familiares, etc. junto a su computador y dispuesto a atender a cualquiera que requiriese de sus conocimientos, desde estudiantes de secundaria, universitarios, de posgrado, hasta sesudos investigadores, siempre al lado de su esposa Elba Ruiz de Peraza, valiente luchadora social, quien siempre constituyó un baluarte para su esposo, igualmente siempre estuvo constantemente muy cerca de sus hijos, Trina María, José Félix, Elba Virginia y Adriano Reinaldo Peraza Ruiz.
Peraza nos acompañó hasta el 18 de noviembre de 2008, cuando falleció víctima de los efectos perniciosos del cigarrillo, pero para los que comprendemos su significado en este conglomerado humano, siempre estará presente entre nosotros.
Peraza nos acompañó hasta el 18 de noviembre de 2008, cuando falleció víctima de los efectos perniciosos del cigarrillo, pero para los que comprendemos su significado en este conglomerado humano, siempre estará presente entre nosotros.
Reciban todos sus familiares nuestras condolencias. Paz a su alma.
1 comentario:
lastima era una enciclopedia viviente, dio mucho por el Hatillo
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