Músicos dieron una serenata a la patrona Santa Rosalía de Palermo
Hubo una exhibición de automóviles antiguos
El de ayer fue un domingo diferente en El Hatillo. En la iglesia, la misa veneraba a la patrona Santa Rosalía de Palermo cuyas fiestas culminaron con la algarabía de los devotos y visitantes.
La casa parroquial se convirtió por un día en una vivienda de la época colonial. El club de abuelos de El Hatillo se encargó de conseguir objetos, trajes y fotografías de ese tiempo.
Las damas antañonas del club recibían a los visitantes en la puerta de la casa con sus vistosos trajes y abanicos. Felicia Oropeza, de Caicaguana y Felicia Pacheco de Sabaneta eran dos de las abuelitas que trabajaron en la entrada para saludar a los asistentes. "Estamos contentas, venimos a las fiestas todos los años con nuestras familias. La patrona es importante para todos los hatillanos", dijo Pacheco.
Los visitantes tenían la opción de vestirse con los atuendos de la época que llevaron los abuelitos y tomarse una fotografía en tono sepia.
La plaza Bolívar estaba decorada con flores de papel y había vendedores de dulces y de productos del cacao traído por expositores de la Feria del Chocolate de Barlovento. Al frente una exposición de automóviles antiguos, promovida por el club Le Pursang, llamó la atención de quienes circularon por la zona. Los niños se acercaban para tomar fotografías con los teléfonos.
Nelson de la Rosa, vicepresidente del club de coleccionista de carros antiguos, dijo que es la quinta vez que participan en las fiestas hatillanas y que los dueños de los vehículos disfrutan al exhibirlos en un día tan especial.
Al caer la tarde, varios grupos musicales ofrecieron una serenata a Santa Rosalía en el anfiteatro de El Hatillo.
Hubo una exhibición de automóviles antiguos
El de ayer fue un domingo diferente en El Hatillo. En la iglesia, la misa veneraba a la patrona Santa Rosalía de Palermo cuyas fiestas culminaron con la algarabía de los devotos y visitantes.
La casa parroquial se convirtió por un día en una vivienda de la época colonial. El club de abuelos de El Hatillo se encargó de conseguir objetos, trajes y fotografías de ese tiempo.
Las damas antañonas del club recibían a los visitantes en la puerta de la casa con sus vistosos trajes y abanicos. Felicia Oropeza, de Caicaguana y Felicia Pacheco de Sabaneta eran dos de las abuelitas que trabajaron en la entrada para saludar a los asistentes. "Estamos contentas, venimos a las fiestas todos los años con nuestras familias. La patrona es importante para todos los hatillanos", dijo Pacheco.
Los visitantes tenían la opción de vestirse con los atuendos de la época que llevaron los abuelitos y tomarse una fotografía en tono sepia.
La plaza Bolívar estaba decorada con flores de papel y había vendedores de dulces y de productos del cacao traído por expositores de la Feria del Chocolate de Barlovento. Al frente una exposición de automóviles antiguos, promovida por el club Le Pursang, llamó la atención de quienes circularon por la zona. Los niños se acercaban para tomar fotografías con los teléfonos.
Nelson de la Rosa, vicepresidente del club de coleccionista de carros antiguos, dijo que es la quinta vez que participan en las fiestas hatillanas y que los dueños de los vehículos disfrutan al exhibirlos en un día tan especial.
Al caer la tarde, varios grupos musicales ofrecieron una serenata a Santa Rosalía en el anfiteatro de El Hatillo.
Radio Comuna El Hatillo haciendo eco de lo que se hablaba en la Plaza Bolívar dice: PERO NO SE OLVIDEN QUE SIGUEN LOS MISMOS PROBLEMAS EN EL HATILLO................INSEGURIDAD Y MALOS SERVICIOS PUBLICOS
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